sábado, 30 de marzo de 2019

Caldereta de pescado y marisco


Cuando sales de  viaje es muy conveniente, en el último momento, dar un repaso por la casa para ver que todo queda en orden y no te vas a encontrar ninguna sorpresa al volver. No importa si el resto del pasaje tiene que aguardar diez minutos más, el retraso merece la pena.
Así  lo hacemos en mi casa y de esta manera reducimos los riesgos de percances inoportunos y de gastos imprevistos.
Con tal prudente protocolo en la última vuelta a casa solo tuvimos que afrontar dos pequeñas inconvenientes  que resolvimos con comodidad y presteza: el congelador abierto con toda su carga perdiéndose  y el despertador  que,  con su alborada melodiosa,  anunció la llegada de un nuevo día a los vecinos el sábado y el domingo.
En aquellos momentos hubo de recurrir, otra vez, a la cocina instintiva y en un momento robado al sueño, cocinamos menestras, marinados  y el plato que os presento este mes: Caldereta de pescado y marisco.
Los ingredientes son sencillos: el pescado y marisco  que quieras, ajo, perejil, pimiento y un poco de vino blanco. Con un poco de tomate triturado y algo de cayena al gusto hubiera estado mejor.
La única regla a seguir es la cocción; se irán añadiendo,  según necesiten los ingredientes,  de más a menos tiempo: cefalópodos, pescados y mariscos.
Afortunadamente, los vecinos no se quejaron y,  para compensar tantos disgustos,  celebramos que  apareció al llegar a casa el teléfono móvil  del que se ignoraba su paradero y se temía que hubiera caído en manos de malhechores junto con la tarjera de crédito que le acompañaba.
Seguid siempre mi consejo; sed previsores.