domingo, 28 de junio de 2020

Ensaladilla

La ensaladilla rusa es un plato sencillo, rico y tradicional y por ello ostenta cualidades que le hacer merecedor, sin más justificaciones, de un lugar en este blog en esta época del año.

Si te informas en la red de cómo hacer una buena ensaladilla y qué se ha de hacer para no cometer los intolerables errores habituales lo más probable es que desistas de intentarlo.

Por supuesto que lo mejor es hacer la salsa casera, basta con tener los ingredientes necesarios y saber hacerla bien, para lo cual primero debes aprender.

 Yo dudo mucho que alguien que sepa hacer una mayonesa casera necesite asistencia para cocinar una ensaladilla.

Además, por supuesto, los productos han de ser de la mejor calidad y con garantía de frescura. Con eso y con unos guisantes naturales, frescos y  en su punto de maduración ya puedes ponerte en faena.

Considerando que yo no sé hacer salsa mayonesa a pesar de que tengo un blog de cocina me atrevo a dar unos consejos, fruto de mi experiencia, para que todo el mundo tenga su ensaladilla y disfrute de ella sin demasiado trabajo ni celebración.

Cocerás las patatas peladas y cortadas en trozos grandes y la zanahoria pelada  y en tiras tras cortar longitudinalmente cada pieza en cuatro secciones. A media cocción se añaden los guisantes congelados y la sal y se acaba de hervir todo junto.

 Los huevos se cuecen aparte.

No escurras la verdura hasta que esté templada, no fría, para que no quede reseca ni muy aguada. Puedes añadir un chorro de vinagre que ayudará en su conservación.

Una vez fría o casi fría cortarás todo además de los huevos y de aceitunas deshuesadas y añadirás  el bonito en lata desmigado.

Para el corte es conveniente una cuchilla de verduras de rejilla que junto con un cuchillo te permite picarlo todo en tacos como de un centímetro muy rápidamente. Esta cuchilla no es fácil encontrarla pero las  hay y son sencillas y baratas. Facilita mucho el trabajo más pesado de la ensaladilla.

La salsa será la que más te guste, hay una gran variedad en el mercado y los toques personas a tu elección: pimiento asado  en conserva, encurtidos, espárragos…. darán tu toque personal o de gaudeamus al manjar.

La higiene en su preparación se debe extremar al máximo al elaborarse parte de ello con las manos.

Sírvase fría.

Es una forma muy sencilla de hacer un plato riquísimo con un buen resultado.

Disfrutemos de los pequeños placeres del verano este año, los grandes planes deben esperar.


lunes, 1 de junio de 2020

Legumbres

El consumo de legumbres es esencial en una dieta sana y equilibrada. Por algo son un alimento tradicional que tiene una importancia relativa alta en casi todos los continentes, a lo que contribuyen  los beneficios que aportan a la salud,  su fácil conservación, las pocas exigencias del suelo para su cultivo y el saldo positivo de la huella ambiental que deja su producción.
Tal vez se adolece en algunas regiones de falta de variedad para su elaboración y por ello, cuando llega el tiempo más caluroso, se consumen menos legumbres por falta de tradición de elaborar platos fríos o menos grasos con ellas.
Los garbanzos con bacalao, las lentejas con verduras, potajes de vigilia o de cuaresma en general, las alubias blancas con pescado o marisco o las vinagretas de alubias o garbanzos, son recetas que nos permiten disfrutar todo el año de los platos de cuchara y beneficiarnos de las ventajas de las legumbres, también con el calor.
Las recetas con pescado son un buen plato único y las vinagretas se pueden servir como primer plato o para mejorar ensaladas o platos combinados.
Para cerrar, espero, la crónica de la peste que estamos viviendo… ¿qué diré?
Esta epidemia y su gestión ínfima y mendaz, además de muerte y marasmo económico, nos ha dejado todo patas arriba.  Mujeres atléticas y asilvestradas,  hombres meticones y atizapucheros, jóvenes atolondrados y ensimismados, niños hocicados y  obcecados en las pantallas electrónicas y una buena parte de ciudadanos irresponsables son las secuelas de esta epidemia.
La irresponsabilidad de algunos tal vez tenga mucho que ver con el primer despropósito. Pero, sarna con gusto no pica pero mortifica, y teniendo en cuenta que la vida es un cuarto de gusto por tres de mortificación, no hicimos buen negocio.
Pero… ¡tranquilos!, aquí llegan voluntariosos para salvar la economía por el cómodo procedimiento de sentarse en la terraza, versión sofisticada del tradicional no hacer nada, con el aliciente de ser servido y de que te vean.
Pero ¡cuidado!, ¡no te pases con la factura!, que te lo publico en Instagram. Y de propina, ¡nada!, ¡que les suban el sueldo!